Gracias a los avances en cirugía estética, ahora es posible mejorar nuestra imagen con todas las garantías para conseguir, no sólo una mejor aceptación del entorno, sino principalmente un aumento de nuestra autoestima que nos haga sentirnos bien con nuestro cuerpo. Todo ésto es posible con el aumento de pecho, una sencilla cirugía, denominada técnicamente mamoplastia de aumento, que sirve para mejorar el tamaño, la forma y la proporción de los senos y realzar el contorno de la mujer. Se trata de la cirugía más comúnmente requerida por nuestras pacientes para moldear una parte clave del físico femenino y así mejorar su imagen y sentirse a gusto con su cuerpo.
Novedades médicas y la creatividad humana han convertido a los implantes de senos en una intervención quirúrgica muy popular entre las mujeres que desean aumentar su talla de sostén. Mucho se ha escrito y se ha dicho acerca de las prótesis de mama, que si son buenas, que si son malas, que todo depende del organismo sus características y que varían según las manos del médico. La buena noticia es que diversas investigaciones sobre el tema han descartado la relación entre los implantes y el cáncer de mamas. Las enfermedades auto inmunes aparecen con la misma frecuencia en población femenina que usa prótesis que en la que no las usa. La Cirugía de aumento mamario con prótesis es una de las operaciones más frecuentes dentro de la Estética Corporal. El bienestar psíquico que produce la cirugía mamaria es tan extenso que el hombre jamás podrá entenderlo. En nuestro Centro de Láser y Cirugía Plástica vivimos frecuentemente el cambio positivo que experimentan mujeres que antes de la operación tenían personalidades menoscabadas o problemas de inseguridad enormes. Nuestros pacientes que nos consultan sobre el aumento mamario usualmente han estado pensando en este tema por muchos años, la mayoría ha sufrido en forma escondida a veces a un nivel inimaginable. La implantación de una prótesis de mamas se conoce en el argot médico como mamoplastia de aumento.

Los implantes mamarios son colocados quirúrgicamente usando alguna de las siguientes cuatro incisiones: axilar, periareolar, submamario y umbilical. Estas vías permiten la colocación de la prótesis bajo la glándula mamaria y el músculo pectoral o subglandular (entre el músculo pectoral y la glándula mamaria).

No todas las incisiones y colocaciones son apropiadas para todas las mujeres. Por eso es que conociendo las opciones y discutiéndolas con nosotros, podremos juntos decidir aquella combinación que sea la adecuada para usted.

1. La incisión inframamaria es la más frecuente y se realiza en el pliegue que se forma bajo la mama, y la prótesis se inserta por ella. El tejido glandular se perturba mínimamente, y la pequeña cicatriz de la incisión remanente se oculta en el pliegue de piel bajo la mama.
2. La incisión periareolar se hace sobre el margen del área más oscura de la areola (pezón), insertándose a través de ella el implante. La cicatriz se camufla muy bien en ésta zona. Esta vía no es apta para personas con aréolas muy pequeñas.
3. La incisión axilar se realiza en la axila y por ella se inserta la prótesis, la que cae en un bolsillo sobre o bajo el músculo pectoral. La cicatriz se camufla en los pliegues de la axila.
4. La incisión umbilical se realiza en el ombligo y por ella se inserta la prótesis, la que se coloca bajo el músculo pectoral. La cicatriz queda camuflada en el borde del ombligo.
El aumento de mamas por medio de implantes da resultados definitivos. Sus pechos lucirán mejor por mucho tiempo. Posiblemente quedarán un poco más firmes que antes, lo cual resulta preferible para la mayor parte de las mujeres operadas, aunque no para todas. Es probable que usted reciba elogios y críticas, pero lo importante es que usted misma se sienta segura y satisfecha con su propio cuerpo, que pueda usar la ropa que le gusta, de la forma que le gusta, y que se guste a sí misma cuando se mira al espejo. Ese es el objetivo de la cirugía. Si con nuestra ayuda usted lo alcanza, como sucede la mayoría de las veces, podemos hablar de éxito.

Generalmente, para esta operación se aplica anestesia general. Adicionalmente recomendamos la aplicación de masajes luego de la intervención para evitar la retracción capsular, que se da cuando el organismo envuelve la prótesis con una capa de tejido que puede dar una sensación de firmeza y dureza poco natural del pecho. La retracción se da en un 10% de los casos.