Son los casos conocidos como prognatismo (o deformidad dentofacial de clase III). El paciente tiene una distancia elevada entre el mentón y el cuello, la parte inferior de la mandíbula muy marcada y, en cambio, el surco labiodental muy poco definido. El mentón suele tener una forma cuadrada y a menudo está algo desviado. También suele existir cierta falta de proyección en el tercio medio de la cara